Nuestra Confesión de Fe
Creemos y Proclamamos

Creemos y proclamamos que hay un solo Dios verdadero, Creador y Sustentador de todas las cosas, infinitamente perfecto y eternamente existente en tres personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo. "Oye, Israel: Jehová nuestro Dios, Jehová uno es. " (Deuteronomio 6:4)

Afirmamos con gozo que Dios creó el universo por el poder de Su palabra soberana y conforme a Su voluntad perfecta, mostrando Su gloria en toda la creación. "En el principio creó Dios los cielos y la tierra." (Génesis 1:1)

Reconocemos y creemos que la Biblia es la Palabra de Dios, inspirada, infalible e inerrante. Ella es la única regla suficiente y autoritativa para nuestra fe y práctica, revelando el carácter y la voluntad de Dios. "Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos." (Hebreos 4:12)

​Creemos que Dios el Padre, la primera persona de la Trinidad, es el Creador y Gobernador soberano del universo. En Su gracia y amor sustenta todas las cosas conforme a Su perfecto propósito. "Un Dios y Padre de todos, el cual es sobre todos, y por todos, y en todos." (Efesios 4:6)

Confesamos que nuestro Señor Jesucristo, nacido de una virgen, es Dios encarnado. Él es plenamente Dios y plenamente hombre, y Su vida sin pecado, Su muerte expiatoria y Su resurrección son el fundamento de nuestra redención y reconciliación con Dios. "Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre." (1 Timoteo 2:5)

Proclamamos que Jesucristo, el Hijo eterno de Dios, es coigual consustancial y coeterno con el Padre. Por medio de Él fueron creadas todas las cosas y en Él todas las cosas subsisten. "Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra... y todas las cosas en él subsisten." (Colosenses 1:16-17)

​Creemos que el Espíritu Santo es la tercera persona de la Trinidad, quien obra en la regeneración, santificación y consuelo de los creyentes. Él mora en nosotros, nos guía en la verdad y nos capacita con dones espirituales para la edificación de la Iglesia. "Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre." (Juan 14:16)

Proclamamos que la salvación es un acto soberano de la graciade Dios, recibida únicamente por medio de la fe en Jesucristo. La sangre derramada de Cristo en la cruz proporciona el único camino para la justificación, el perdón de los pecados y la adopción como hijos de Dios. "Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios." (Efesios 2:8)

Afirmamos con esperanza la resurrección gloriosa de Jesucristo, Su ascensión al cielo y Su regreso personal y triunfante. Él vendrá a buscar a Su Iglesia y establecer Su reino eterno con justicia y paz. "He aquí, yo vengo pronto, y mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según sea su obra." (Apocalipsis 22:12)

Proclamamos que el reino de Dios es el cumplimiento de Suspromesas eternas. Cristo reinará sobre Su pueblo redimido, restaurando todas las cosas conforme a Su propósito glorioso. "Y el reino y el dominio y la majestad de los reinos debajo de todo el cielo, será dado al pueblo de los santos del Altísimo." (Daniel 7:27)